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Bienvenidos

Soy una persona normal, casada, madre de dos hijos, trabajadora, entusiasta, que disfruta los pequeños momentos buenos de la vida y a la que le gusta escribir. Hoy inicio este Blog para que queden plasmados mis pensamientos, opiniones o comentarios y algún día, quizás mis hijos lo lean y me conozcan un poquito mejor. Simplemente contaré momentos de mi vida cotidiana o compartiré alguna opinión que me parezca interesante. ¡Bienvenidos!

domingo, 29 de julio de 2012

Ser positivos



En estos tiempos difíciles que corren, no soy la única que piensa que necesitamos que nos lleguen noticias positivas. Se dice, por ejemplo, que una actitud positiva es esencial para vencer enfermedades tan graves como el cáncer, entre otras. Pues bien, este país llamado España, necesita ahora mismo esa actitud.

En este país estamos atravesando por una crisis sin precedentes que puede desmoralizar al más optimista. Las noticias que escuchamos diariamente son demoledoras. Estamos hartos de recibir malas noticias de forma constante, ya sea por los medios de comunicación, por la gente que conocemos, por lo que escuchamos en la calle, etc.

Necesitamos ser positivos. Necesitamos creer que hay una luz al final del túnel. Necesitamos saber que esta crisis la vamos a superar y que a nuestros hijos les espera un futuro mejor.

Antes, la única prima de la que oíamos hablar, era la prima del pueblo que nos venía a visitar, o aquella prima del pueblo de nuestro amigo que estaba buenísima. Ahora, la prima de la que todos hablan, es la "prima de riesgo". Mucha gente no acaba de entender lo que significa, pero sí sabemos todos que ha salido disparada y que mientras más elevada sea, peor nos va en nuestra economía.

Cada día escuchamos en los telediarios estas noticias que nos meten el miedo en el cuerpo; miedo que aprovechan los gobernantes para recortar y recortar sin límites muchos de los derechos adquiridos mediante la lucha de nuestros antepasados, pero que ahora no se pueden mantener, pues según ellos, es insostenible la situación. Ahora nos toca a nosotros, el pueblo, sacrificarnos por lo que los gobernantes y banqueros han hecho mal.

Es totalmente injusto, pero vuelvo a repetir, necesitamos ser positivos ante el panorama que se nos avecina, saber que podemos seguir luchando contra viento y marea para salir de esta situación.

No digo que haya que disfrazar la realidad, sino que todos, incluyendo a los medios, debemos esmerarnos en buscar debajo de las piedras cualquier atisbo de noticias positivas que nos generen un rayo de esperanza. Algo de confianza para un pueblo castigado y desconfiado. Basta ya de hablar cada día de la crisis.Vamos a buscar noticias positivas y difundirlas. Porque la esperanza es lo último que se pierde y eso es precisamente lo que necesita este país: Esperanza.


sábado, 19 de mayo de 2012

El "corralito" en España


Foto tomada de laopiniondemurcia.es


Hace tiempo que se oyen rumores en España sobre la posibilidad de un "corralito" al más puro estilo argentino. Para los que no lo sepan, en Argentina se llamó "corralito" a la restricción para retirar de bancos y cajas de ahorro el dinero en efectivo de cuentas corrientes o plazos fijos.

Nuestra economía ha caído al más bajo nivel y la gente tiene miedo de que sus ahorros les sean retenidos o arrebatados.

El señor De Guindos, actual ministro de Economía, se ha apresurado a desmentir esos rumores, afirmando que "lo del corralito es un sinsentido".

La gente tiene miedo. No es la primera vez que el gobierno nos engaña. Cuando empezó la temida crisis, el Gobierno anterior se empeñaba en afirmar una y otra vez que no había crisis en España.

En las últimas campañas políticas para acceder a la presidencia, el Gobierno actual afirmó una y otra vez que no subiría el IVA y ahora el Sr. Rajoy dice que hará lo que tenga que hacer para salir de esta gran crisis que ha llevado al país a la ruina.

Reformas y más reformas en servicios esenciales como la educación, la sanidad, los servicios públicos y esenciales para los ciudadanos de a pie, que somos los que finalmente pagamos los platos rotos de una gran deuda propiciada por políticos y banqueros, esos que ahora hay que "salvar" para que nos puedan volver a prestar dinero y la situación se vuelva a normalizar.

Es indignante la situación. Los que no tenemos nada o escasos ahorros no estamos tan preocupados porque al fin y al cabo, no tenemos mucho que perder, pero los que tienen los ahorros de toda la vida, tienen miedo, no saben qué hacer si al final los presagios resultan ser ciertos y se impone el "corralito" en nuestro país.

La economía no se mueve, está estancada. La gente sin trabajo evidentemente gasta en lo esencial, temiendo el día en que se le termine la prestación por desempleo, casi como el día del juicio final. Los que tenemos trabajo, somos afortunados, pero no tenemos ninguna seguridad, ya que la empresa puede cerrar o nos pueden despedir más fácilmente alegando motivos financieros, por lo tanto tampoco gastamos el poco dinerito que obtenemos con nuestro salario. Si no compramos, las empresas no venden, si no venden, las empresas nos echan a la calle o cierran sus puertas, si nos echan, nos vamos al paro, si vamos al paro, no compramos nada... en fin que es el pez que se muerde la cola.

Estamos en una situación de impotencia y desesperación porque vemos como van desapareciendo los derechos por los cuales nuestros padres y antepasados lucharon e incluso algunos perecieron en esa lucha, mientras el Gobierno se ampara en la "austeridad y el sacrificio" que ahora todos los ciudadanos debemos practicar para no caer en el abismo.

No me gusta hablar de temas políticos en los blogs en lo que escribo, pero llega un momento que todas las voces deben sonar al unísono, en defensa de nuestros derechos y nuestra dignidad. Estamos hartos de recortes, de la corrupción de los políticos, de que los bancos nos manejen a su antojo, de que algunos sigan viviendo con total comodidad mientras que los más desfavorecidos cada vez tienen menos. ¡Estamos hartos y queremos que nos oigan!

sábado, 7 de enero de 2012

Publicidad de las compañías telefónicas


Empiezo a estar cansada de tantas ofertas publicitarias. Continuamente recibo llamadas a mi móvil o a casa para ofrecerme diferentes servicios, principalmente, son compañías telefónicas que me prometen cualquier cosa con tal de que les haga un contrato. Yo no sé si ocurre lo mismo en otros países, pero en España, esta guerra de las compañías de telecomunicaciones, no está saturando.

Últimamente me han llamado de todas las compañías habidas y por haber en este país. La conversación es la siguiente: “-Buenos días Doña X, permítame presentarme, soy tal, de la compañía tal y tengo el gusto de ofrecerle las nuevas tarifas con las que usted se va a ahorrar...” y así siguen, casi sin respirar hasta que han leído de carrerilla todas las maravillas que tienen que ofrecernos. Al principio les escuchaba pacientemente, pero si les hacías alguna pregunta que no estaba en su “guión”, ya los descolocabas y no sabían cómo responderte, pero cualquier respuesta siempre era positiva, con tal de vender, te responden cualquier cosa que quieras oír, aunque no sea cierta. Son como robots. Leen y leen y no escuchan nada de lo que les digamos nosotros.

Ahora directamente les digo que no me interesa. Me dicen “señora, pero si no me ha dejado explicarle, ¿cómo sabe que no le interesa? Y les respondo que no importa lo que me ofrezcan, no me voy a cambiar de compañía telefónica, por lo que no debemos perder el tiempo ni ellos ni yo.

Yo entiendo que tal como está la situación laboral en España ahora mismo, con casi 5 millones de parados, estos “agentes” tienen un empleo más, en el que deben ser diligentes e intentar convencer a los posibles clientes, pero llega un momento en que no es soportable y al final creo que voy a optar por colgar sin hablar. Así no perdemos el tiempo y se pueden dedicar a convencer algún incauto que aún le quede la paciencia necesaria y las ganas de embarcarse en la gran aventura que supone cambiar de compañía telefónica.