Este fin de semana he visto una película francesa muy interesante: The Hedgehog (Le Hérisson) http://www.thehedgehogmovie.com/ donde muestra la vida en una familia de clase alta, a través de los ojos de una niña extremadamente madura e inteligente de 11 años, de familia burguesa y acomodada pero infeliz en su corta existencia y por ello decide suicidarse cuando cumpla 12 años. (No estoy desvelando nada, pues esta información sale al inicio de la película). Es una película triste pero llena de ternura. Todos estamos de acuerdo en que el dinero no da la felicidad (sólo hay que ver a la madre de la protagonista), en que la pobreza no es sinónimo de incultura y en que a veces vamos tán rápido por la vida, que no nos detenemos a ver en el interior de las personas; nos dedicamos a juzgar por las primeras apariencias sin pensar que a veces una simple sonrisa, logra más que mil palabras. En fin, como dijo Henry David Thoreau "El más rico es aquel cuyos placeres son los más baratos". Invito a reflexionar y detenernos a pensar en la magia de una sonrisa, en el placer de un día soleado, en descubrir a las personas por lo que piensan, no por lo que parecen y así nuestra vida será más placentera.
Bienvenidos
Soy una persona normal, casada, madre de dos hijos, trabajadora, entusiasta, que disfruta los pequeños momentos buenos de la vida y a la que le gusta escribir. Hoy inicio este Blog para que queden plasmados mis pensamientos, opiniones o comentarios y algún día, quizás mis hijos lo lean y me conozcan un poquito mejor. Simplemente contaré momentos de mi vida cotidiana o compartiré alguna opinión que me parezca interesante. ¡Bienvenidos!
lunes, 18 de octubre de 2010
Clases burguesas
Publicado por
Antillanasoy
en
2:53
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
El dinero puede llegar a ser un tirano cruel que te subyuga pero solo si tu mismo lo permites. Lamentablemente vivimos en un mundo donde el dinero es la llave que te abre sus puertas y por más que nos empeñemos en pensar que no es así y que podemos prescindir de ese estilo de vida nos estamos equivocando. Como dice el dicho, el dinero no te garantiza la felicidad pero si te puede ayudar a conseguirla. Esto es una triste pero verdadera realidad. Lo importante es saber que contamos con él para conseguir nuestras metas y llevar una vida sana emocionalmente y económicamente al lado de nuestros seres queridos pero no
ResponderEliminarpermitirle jamás o mejor dicho, no permitirnos jamás que este nos cambie nuestra esencial porque el dinero no es un ser que toma decisiones o que puede alterar nuestras vidas por él mismo, somos nosotros mismos los que podemos llegar a tomar las decisiones incorrectas o alterar nuestras existencias y como suele suceder con la culpa, acusar a su influencia por nuestros errores como si habláramos de un ser pensante y animado en lugar de asumir que los únicos culpables de nuestro destino somos nosotros mismos: los humanos.